Construido hacia el 380 a.C., el Tholos de Atenea Pronaia es una sorprendente estructura circular de mármol que originalmente contaba con 20 columnas dóricas que rodeaban una cella central. Con el paso del tiempo, el templo sufrió una combinación de desastres naturales, como los terremotos habituales en la región, e intervención humana, como la reutilización de la piedra en construcciones posteriores. Como resultado, hoy sólo quedan en pie tres de las columnas originales.